El inigualable escenario de la alcazaba de Guadix acogió este viernes por la noche el acto de entrega de reconocimientos que cada año otorga la Hermandad de la Virgen de la Piedad de Guadix en la presentación oficial del Cascamorras y que, ante la imposibilidad de celebrar la fiesta debido a la suspensión de las carreras de Baza y Guadix por la pandemia, se ha convertido en un acto de exaltación de Cascamorras.
Numerosas autoridades locales, provinciales y autonómicas de dieron cita en este evento entre los que se encontraban el alcalde de Guadix, Jesús Lorente, el alcalde de Baza, Manuel Gavilán, el Consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, el Delegado del Gobierno, Pedro Fernández, el Jefe del Mando de Adiestramiento y Doctrina del Ejército de Tierra, Teniente General Jerónimo de Gregorio y Monmeneu o el obispo de Guadix, monseñor Francisco Jesús Orozco Mengíbar.
Y es que los galardones de este año han tenido como objetivo reconocer la labor de todas aquellas personas que han estado en primera fila luchando contra el virus, especialmente en los meses más duros del confinamiento. De esta forma el máximo reconocimiento de la Hermandad, el Pin de Oro del Cascamorras fue para sanitarios y sanitarias de Andalucía, y fue recogido por el Consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, y para los Cuerpos de Seguridad y Defensa del Estado (ejército) que fue recogido por Jefe del Mando de Adiestramiento y Doctrina del Ejército de Tierra, Teniente General Jerónimo de Gregorio y Monmeneu.
Por su parte los premios Cascamorreros se han otorgado al Hogar Santa Teresa Jornet Hermanitas de los Ancianos Desamparados, Residencia de la Federación de Organizaciones Andaluzas de Mayores, Cáritas, Cruz Roja y Cuerpos de Seguridad Ciudadana (Policía Local, Bomberos, Protección Civil y Guardia Civil).
En su intervención, el alcalde de Guadix destacó que “me complace extraordinariamente que este año se entregue estos reconocimientos a unos colectivos que han contribuido a salvar y salvaguardar vidas. A unos colectivos que cuando los demás nos confinamos en los hogares temerosos del contagio, ellos, con el cuidado como uniforme y la solidaridad como mascarilla hicieron frente a ese escenario incierto, provocado por una pandemia desconocida. Un ejemplo de vocación llevada al extremo sirviendo a los demás, de presencia inquebrantable por el bien común, cuidando aquello que más necesitamos y apreciamos: nuestra salud”.
El primer edil accitano tuvo unas palabras especiales para los voluntarios por su trabajo realizado durante la pandemia señalando “ellos han sido los garantes de las personas más vulnerables de la ciudad. Su sentido de la responsabilidad, de una obligatoriedad que nadie les puede exigir es encomiable. Porque no dejan de ser voluntarios que sacrifican su tiempo, su seguridad, su bienestar para servir a los demás. Y lo han hecho y a base de bien. Estando en todo momento y lugar”.
Jesús Lorente también dedicó unas palabras a la fiesta del Cascamorras “una tradición que forma parte de la idiosincrasia como territorio común convertida en seña identitaria de hermanamiento entre dos comarcas, tan distintas y, a la vez, tan cercanas, Guadix y Baza. Este año los colores negros y marrón volverán a ondear en nuestros corazones ya que no podrán impregnar nuestros cuerpos. Sin embargo, la emoción que nos embargará seguirá siendo la misma, los cascamorreros seguirán creciendo afianzando una tradición que va más allá del personaje. El tambor tañerá en las calles de nuestras ciudades hermanas, Guadix y Baza, Baza y Guadix, y las gentes se acercarán a besar la imagen siempre piadosa de una madre: la Piedad siempre presente en estos duros tiempos que nos ha tocado vivir. Tiempos de guerras víricas y guerras sangrientas. Piedad ante los desfavorecidos, Piedad ante los perseguidos, Piedad ante el mundo deshumanizado. Piedad de Solidaridad con Mayúsculas”.
Durante el acto se pronunció un pregón de exaltación de la figura del Cascamorras que corrió a cargo de la periodista accitana de la agencia EFE, María Ruiz Ortiz. Un pregón cargado de emoción de la que calificaron como una de las mejores embajadoras de la fiesta por toda España, a través de su trabajo, pero especialmente gracias a ser una enamorada de la fiesta del Cascamorras y una accitana orgullosa de su tierra y sus tradiciones. María Ruiz hizo un emotivo recorrido por las sensaciones especiales y únicas que esta fiesta produce, tanto en Baza como en Guadix, y de todos los momentos vividos en una fiesta de la cual hace gala ser muy especial para ella. Un pregón que recibió una gran ovación y que nos hizo por unos momentos sentir que estábamos corriendo de nuevo la carrera del Cascamorras.